miércoles, 25 de enero de 2017

Koh Phi Phi - Koh Lanta

Hola hola!
Después de año y medio me decido a acabar el post del viaje, ya que tengo buenas noticias!!

Pasamos unos días geniales en Pai junto a los compis que conocimos. Planeamos estar unos días y al final fue una semana. Pero después de ello, volvimos a Chiang Mai, a la misma Guest House donde solemos ir (Chiangmai inn GuestHouse), es limpia, tranquila y barata (250THB). Allí pasamos una noche y al día siguiente cogimos un avión hacia Phuket donde pasaríamos una noche y nos iríamos hacia Lanta.


Estando en Phuket conocimos a Sara y Víctor (colombiano él, danesa ella) y nos fuimos hacia Koh Phi Phi en un cambio de planes improvisado. Llegamos allí y enseguida nos pusimos a buscar habitación como siempre. Buscando buscando nos dimos cuenta de que la isla es pequeña y no hay carreteras, no es posible de verla entera con moto, sino que tienes que coger un speedboat cada vez que quieres ir a la parte de arriba. Como la idea era quedarnos un par de noches e ir hacia Koh Lanta, nos quedamos en una habitación cualquiera la primera noche y en otra más barata que encontramos al día siguiente.



Pasamos los dos días paseando e intentando disfrutar de la isla, aunque sinceramente, es muy cara (comparado con el resto, por supuesto), fea, ya que baja la marea y se queda la playa llena de barro y sucia, y hay demasiada fiesta de borrachera mala por las noches. Toda la costa se llena de extranjeros borrachos y música demasiado alta para nuestro gusto... No tardaríamos en largarnos de allí!



Al otro día, pusimos rumbo a Koh Lanta, isla paradisíaca dónde no hay nadie apenas, ya que la gente se queda en su compañera la fiesta... Al llegar al puerto, hablamos con una mujer que nos llevaría a ver una habitación cerca de donde queríamos estar, así que genial, nos ahorrábamos el tuk tuk y si no nos gustaba podíamos ir a la que nos había recomendado Saleh (el chico iraní que conocimos en Nepal), que estaba al lado.

Nos dejaron a la mitad de la isla y allí nos quedamos en la relax bay en unos bungalows chulos con hamaca fuera y a 10 metros de la playa. Allí pasaríamos los 21 días restantes.



Fueron los mejores 21 días de vacaciones que jamás podíamos imaginar! Allí conocimos a Jack, un hombre americano junto al que pasaríamos el tiempo, Amin y a su chica, franceses super majos! También conocimos a Eric, un chico catalán que se nos unió también.



La mayor preocupación del día era... ¿Dónde comemos hoy? Pasamos 21 días literamente haciendo nada! Nos levantábamos, desayunábamos, íbamos a la playa con la moto, de camino un shake, playas de infarto, comida, siesta, café hasta viendo el atardecer, ducha, cena y ZZZzzzzz.




Y vuelta a empezar!!!

















Qué dura fue la vuelta!!!